Concentradores de oxígeno portátiles (POCs) son una de las mejores formas de obtener suministro de oxígeno mientras te desplazas. Funcionan eliminando nitrógeno del aire y comprimiéndolo en un suministro de oxígeno puro. Los POCs se utilizan para ayudar a las personas con afecciones respiratorias crónicas a respirar con mayor comodidad, incluyendo a aquellos que padecen de EPOC, enfisema o asma. Son dispositivos compactos y ligeros que se pueden transportar fácilmente en una mochila o bolso mientras realizas tus actividades diarias, ¡incluso si también usas un aparato de movilidad o silla de ruedas!
¿Cómo funcionan los concentradores de oxígeno portátiles?
Los concentradores de oxígeno portátiles (POCs) funcionan tomando el aire y eliminando el nitrógeno. Esto deja solo el oxígeno, que luego se filtra y se bombea a tus pulmones a través de una cánula nasal o mascarilla.
¿En qué se diferencia de un concentrador de oxígeno convencional?
Un POC se puede llevar contigo, lo que lo hace mucho más conveniente para viajar que los tanques tradicionales. Además, suelen ser más pequeños y ligeros que otros tipos de equipos. La duración de la batería de un POC varía dependiendo del modelo que compres; algunos duran de 4 a 5 horas, mientras que otros funcionan de 8 a 12 horas antes de necesitar más energía. ¡Algunos modelos incluso permiten a los usuarios conectar su propio cable USB a su teléfono o tableta, para tener batería ilimitada mientras usan su dispositivo!
Ventajas del POC
- Silencio y ligereza: El POC es silencioso y ligero, lo que facilita su transporte, incluso con otros dispositivos médicos como un aparato de movilidad o silla de ruedas.
- Versatilidad: El POC se puede usar en muchos entornos diferentes: en casa, mientras viajas e incluso durante actividades al aire libre como acampadas o caminatas.
Conclusión
Lo mejor de los POCs es que son fáciles de usar. No requieren mucho mantenimiento y se pueden usar en cualquier lugar, incluso si no tienes electricidad ni agua corriente. Son ligeros y portátiles, por lo que puedes llevarlos contigo sin que representen una carga para ti ni para las personas que te rodean.